
Para el Tribunal Supremo Electoral (TSE), los últimos cuatro meses de este año son clave para trabajar en la redistribución de escaños parlamentarios y construir el nuevo mapa electoral que será empleado para las elecciones generales de agosto de 2025. Para realizar esta tarea, el ente electoral espera recibir del Instituto Nacional de Estadística (INE), los nuevos datos del Censo nacional de población y vivienda, a nivel departamental a más tardar hasta septiembre, y los datos desagregados hasta diciembre.